MANUELA SAEZ

Barro Calchaquí 2022

Manuela Sáez es ceramista, y también participó del BARRO CALCHAQUI 2022 y nos cuenta sobre su  formación y su experiencia en el encuentro :

Mi nombre es Manuela Sáez,  soy ceramista, docente de artes plásticas, actriz, música, y madre de dos hijes de 9 y 5 años. Desde entonces , mi oficio se volvió más multidisciplinario que nunca, pudiendo tomar herramientas de todas las ramas para poder vivir el propio árbol.

Mi camino por la cerámica comienza en Bahía Blanca, ciudad donde nací y crecí, en el taller de Tato Corte, donde en la labor cotidiana se hablaba constantemente de las culturas iniciáticas, en las cuales se entrelaza la  vida y el barro en un mismo cuenco. O cuento. Luego trabajé como ayudante de Marta Montero, donde aprendí a trabajar en producción seriada,  mas siempre con detalles que hacían de cada objeto una historia única y particular.

Más tarde comencé mi propio taller, donde doy clases hasta el día de hoy, y produzco,alfarería,  mas el último tiempo dedicándome más a fondo a los sonidos del barro. Desde historias de pueblos originarios hasta  un propio cuento han encontrado cauce en formas y sonidos cerámicxs, por lo que hoy estoy trabajando en «Cuento de Sol y Tierra» una obra para toda la familia, donde el teatro y la cerámica confluyen en estado de alquimia. En esta obra, presentación a presentación descubro más y más motivos para seguir investigando y contando en cerámica historias de la tierra. Porque las historias de tradición oral, si dejamos de contarlas, se perderán.  Porque siempre nacen nuevos corazones para cultivar el amor y el respeto por los ciclos de la naturaleza, y porque al compartir lo que sabemos,  todos crecemos entre otros motivos es que participé del encuentro del Barro Calchaquí 2022 con esta obra y una performance en la que, durante los primeros 5 días recibí en una especie de «piñata cósmica-planetaria» historias del origen de diversas culturas que en el día de la presentación (justamente en el 5to, durante las horneadas) rompimos y compartimos entre todxs  lxs allí presentes. Fue hermoso ver a grandes y chicxs  correr hacia las «dulces» historias de la piñata, muchxs gurises esa noche leyeron para todxs en voz alta (y hasta con micrófono!) la leyenda que les había tocado por sorpresa. Un encanto compartir el interés por aprender y preservar la memoria de aquellas historias.

Hoy día vivo en Uruguay, más precisamente en Punta Rubia, departamento de Rocha, donde hicimos con ayuda de muchxs amigxs una hermosa casa de barro, botellas, y techo de paja. También un taller donde hoy día trabajo en diferentes producciones y también dando clases.

@eldondeldragon