3° Encuentro Latinoamericano de Ceramistas «Barros del Qhapaq Ñan»

Del 1 al 6 de julio de 2025 se llevó a cabo el 3° Encuentro Latinoamericano de Ceramistas «Barros del Qhapaq Ñan» en Pisac, Cuzco, Perú.

Una vez más, ceramistas de diversos rincones de Latinoamérica se reunieron para compartir saberes, experiencias, territorios y fuegos, en torno al barro y nuestras culturas vivas. Este evento se realiza a partir de Barro Calchaquí (ver nota), evento que se realiza en el pueblo de San Carlos, en la provincia de Salta, desde 1994.

La Temática de este encuentro, planteada por los organizadores, fue:

“Territorio, entretejido de culturas”

El concepto de territorio abarca tanto el espacio geográfico que habitamos, los bienes comunes esenciales para la vida (como el agua, la tierra, el aire, los bosques), el lugar que nos cobija,  sustenta y permite desarrollarnos, como también nuestras manifestaciones culturales, tradiciones, costumbres, espiritualidad, identidad.
No es solo la tierra que pisamos, sino también la memoria que llevamos, los saberes que nos atraviesan y las prácticas que nos definen. Es la lengua que hablamos, la forma en que nos alimentamos, las plantas que nos sanan, las historias que nos narramos y el barro con el que creamos.
Cuando nos reunimos en el Encuentro Latinoamericano Barros del Qhapaq Ñan, no solo traemos nuestras manos y nuestras técnicas; viajamos con nuestros territorios. En ese encuentro, los territorios se fusionan y dialogan, generando un entretejido de culturas que trasciende lo individual para convertirse en una red de saberes compartidos.
La cerámica, como el tejido, es un acto de unión. Cada hilo –cada ceramista, cada historia, cada tradición– se entrelaza con los demás, creando una trama que nos sostiene no sólo durante el encuentro, sino también cuando regresamos a nuestras comunidades. Esta red,  fortalecida en cada edición, nos conecta a través del tiempo y la distancia, permitiendo que el barro siga siendo el puente entre nuestros territorios y la expresión de nuestras identidades.
Invitamos a los ceramistas a materializar esta idea en sus piezas: que el barro sea el testigo de este entramado de territorios, donde las culturas se entrecruzan, se reconocen y se enriquecen mutuamente.

En esta ocasión, la experiencia permitió el encuentro con ceramistas de Chile, Turquía, México, Perú, Argentina, Venezuela y Colombia.

Gabriela Moleres, ceramista de Buenos Aires que participa del evento,  nos cuenta sobre la  modalidad del encuentro, similar al del «Barro Calchaquí». En esta edición, participaron más de 30 ceramistas que desarrollaron sus obras en torno a una temática común: el territorio. En total, más de 80 personas participaron ofreciendo talleres, charlas, proyecciones audiovisuales, mostrando diversas formas de trabajar y compartiendo experiencias.
Se trató de un encuentro autogestivo, dónde todos participaron de una forma  horizontal. Se involucraron en el cuidado de la arcilla, y asumieron colectivamente las tareas que surgían en el día a día.
En los talleres se utilizó arcilla que fue preparada por personas del lugar la cual fue cuidadosamente usada y luego recuperada. No todas las piezas fueron horneadas; sólo se cocieron las obras de las y los participantes seleccionados para esa instancia.

Asimismo, Gabriela Moleres, con gran generosidad, se encargó de recopilar algunos testimonios de varios ceramistas participantes para compartirlos con la revista.

Rogerio Carvalho
«Soy de Brasil. Estuve en San Carlos, en el encuentro Barro Calchaquí el año pasado, y esta es mi primera vez en Pisac. Me siento muy honrado de poder participar junto a todos los
hermanos de América Latina.»

 

 

 

Franklin Mamani Luque
«Soy natural del distrito de Pucará, en el departamento de Puno, Perú. Pucará es conocido por ser un distrito puramente ceramista. En los años 700 ya era reconocido como la industria de la cerámica porque se producía cerámica en cantidad, especialmente en el estilo vidriado colonial.

La técnica que trabajo es la cerámica torneada en torno a pedal, y también realizo piezas modeladas a mano, como las esculturas de toritos de Pucará, que a veces me solicitan y yo elaboro.
Mi parte fuerte es la cerámica vidriada. Yo soy netamente ceramista en el estilo colonial, realizo vidriado, loza…. Soy un artista pintando aves, dibujando. Me gusta  compartir.
Participo en grandes ferias como la feria nacional Ruraq Maqui y De nuestras manos, ambas en Lima. También soy invitado a eventos y ferias nacionales e internacionales, representando al Perú y, sobre todo, a Pucará»

Rosalía Tineo Torre
“Vengo de la región de Ayacucho. Mi técnica es ancestral, cien por ciento manual; no utilizamos moldes ni siquiera un torno. Empleamos colores naturales, es decir, tres tonalidades que provienen de tierras naturales. En el año 2021, este estilo propio de la familia Tineo fue reconocido como Patrimonio Cultural del Perú.

Yo continúo con el trabajo de mis ancestros, de mi abuela y de mi padre. Tras su fallecimiento, soy quien ha seguido con esta labor y con el legado que él me dejó. Me siento muy honrada, emocionada y orgullosa de que hayamos sido reconocidos como patrimonio; es un homenaje a mi padre.
Estoy dispuesta a participar en estos encuentros para compartir mis conocimientos y aprender nuevas técnicas, conocer a nuevos maestros y maestras, intercambiar experiencias y participar en conversatorios. Aún me falta mucho por conocer e investigar sobre la cerámica, y gracias a la invitación de Gastón Contreras, esta es la tercera vez que asisto a este encuentro de Pisac. También he participado en los encuentros de Bolivia, Nazca, Caral y, por supuesto, Ayacucho. Saludos a todos”.

Pato Domínguez
“Soy de Trenque Lauquen, en la llanura del oeste de Buenos Aires. Hago cerámica con técnicas ancestrales y, de alguna manera, trato de tender un puente entre las técnicas y las formas de nuestra América ancestral y nuestro mundo contemporáneo, nuestra manera de percibir la naturaleza, de andar por el mundo y de incorporar las imágenes actuales. Así que el trabajo que realizo es, en parte, ese puente entre lo ancestral y el arte contemporáneo. Trabajo con
engobes, con colores, con esgrafiados y con formas típicas como los metawes, los queros y otras”.

 

Mar Ochoa
“Estoy participando en el tercer Encuentro de Barros del Qhapaq Ñan. Me siento muy feliz de estar aquí en Pisac, representando a la provincia de Santa Fe. Creo que lo más valioso del encuentro es, justamente, poder encontrarnos hermanados por el barro. Estoy muy agradecida por la oportunidad”.

 

 

Chany Vargas
“Soy de Santa María, Catamarca, Argentina. Mi técnica es el desgastado y tallado. Mi trabajo consiste en una chakana de base con un cactus y una serpiente”.

 

 

 

 

Carmen Chacana Vera
“Yo vengo de Catapilco, en la Quinta Región del centro de Chile. Represento a mi etnia Diaguita. Estoy trabajando en el rescate de la tradición alfarera de mi pueblo, que se había perdido. Estoy realizando un estudio y un proceso de recuperación para que esta práctica vuelva a florecer en mi territorio. Muchas personas se han encantado con el barro. Estos encuentros me sirven para aprender, llevar inquietudes a mi pueblo, enseñar y compartir todas estas bellezas. Transmito lo que sé y, al mismo tiempo, aprendo de los demás. Soy reconocida oficialmente como Diaguita”
.

 

Paloma Arredondo
“Soy artista visual de la ciudad de Iquique, Chile, tengo 30 años y llevo aproximadamente tres o cuatro años explorando la cerámica. He trabajado a partir de procesos que aprendí con distintas personas a lo largo del territorio chileno. En esta ocasión, estoy desarrollando una pieza por placas, construida a partir de tres esferas. Utilicé esferas de plumavit (en Argentina, telgopor), que cubrí con pantys o medias, y sobre eso apliqué las placas para formar las esferas. Así fue como logré construir una pieza de cuatro niveles, conformando una sola estructura ahuecada.

El contenido de mi trabajo, en general, se inspira en la estética de las formas propias del territorio donde nací, especialmente el mar. Me interesan los objetos con los que el mar interactúa: las rocas, las conchas, el movimiento del agua y también la arena. Ahora que estoy en Pisac, busqué trabajar a partir de estéticas locales, y una de ellas fue la textura de las caiguas, un fruto que también existe en el territorio del que pertenezco, lo que sentí como un punto de encuentro entre ambos lugares.
Estoy en Pisac gracias a una amiga que participó del encuentro; me postulé y fui seleccionada. Ha sido una gran oportunidad, estoy muy agradecida y espero poder seguir participando, porque he aprendido muchísimo sobre cerámica sudamericana”.

Marta Vargas
“Soy de Santa María, Catamarca, en el Valle Calchaquí, Argentina. Soy profesora del Centro Aurora de un Mundo Nuevo.
Nuestra escuela tiene una formación FAPIC, que significa Formación Artística, Productiva, Industrial y Cultural. Los estudiantes se forman como emprendedores y contamos con seis orientaciones: diseño y promoción cultural, diseño gráfico, diseño y producción textil, diseño y producción en metalistería, y diseño y producción en cerámica.
En el área de diseño y producción en cerámica, hemos venido a participar con 12 alumnos de distintos años. Esta formación dura tres años, y cada año se organiza por módulos, como si fueran cursos-talleres. Por ejemplo, en primer año tienen el módulo de diseño y producción de cerámica, donde aprenden técnicas manuales y hacen reconocimiento de las arcillas de nuestro territorio. Otro módulo es el de decoración y esmaltes, en el cual investigamos engobes naturales y otros para los que se deben adquirir materias primas, elaborando distintas fórmulas, incluidos esmaltes. También contamos con un módulo de construcción de hornos, donde los estudiantes aprenden técnicas de horneado desde las más ancestrales —como el horneado en pozo con guano— hasta técnicas de tiro directo, tiro invertido, y el uso de horno eléctrico.
En segundo año, los alumnos se enfocan en la investigación de estilos contemporáneos, medios expresivos y tecnología aplicada a la cerámica, con práctica en torno. A lo largo de los tres años, tienen un módulo orientado a la formación emprendedora, con el objetivo de que egresen con un estilo propio, su marca, su sello, packaging y redes sociales.
Se les brinda distintas herramientas y desde mi rol como ceramista, siempre busco que los estudiantes puedan conocer otros talleres, otras formas de trabajo, y participar en encuentros. Uno de nuestros objetivos este año fue participar del Encuentro de Barros del Qhapaq Ñan, en Pisac, Perú —ya que otros años asistimos al encuentro en San Carlos, Argentina—. Esta vez, el viaje también fue una experiencia de gestión colectiva: los estudiantes redactaron notas, organizaron loterías, chifas y talleres abiertos para reunir los fondos necesarios. Todo esto permitió identificar y potenciar las capacidades de cada uno.
Vinimos con nuestra directora, Lara Dilacio, y trajimos una propuesta de charla-taller sobre nuestras arcillas, haciendo un recorrido histórico basado en un estudio paleontológico de nuestro valle, que analiza los sedimentos y las arcillas depositadas por los ríos durante las crecidas. Mostramos cómo las modificamos y adaptamos para las prácticas cerámicas.
Viajamos muchos kilómetros con nuestra arcilla, y en el taller realizamos dos urnas colectivas de estilo santamariano, de 25 cm, en las que participaron los asistentes del encuentro. Tanto la construcción como la pintura fueron procesos colectivos, en los que cada persona aportó su impronta, su energía y su cuidado. Muchísimas gracias”.

Participantes

  • Belén Álvarez, San Martín de los Andes, Argentina
  • Marina Viganó, Colectivo Fuego Directo, Neuquén, Argentina
  • Agustín Miguel Nicolás, Esquel Chubut, Argentina
  • Patricia Domínguez, Trenque Lauquen, Argentina
  • Carolina Felix, Pichincha, Ecuador
  • Alice Roger,Bombardi, Brasil
  • María Angélica Fernandez, Argentina
  • Angélica Romero, Colombia – España
  • Fonda Sanchez, México
  • Pilar Soto Orizano, Cerro de Pasco Perú
  • Madeleine Macias V, Colombia
  • Yuly Vanessa Olivares, Zuñiga, Chile
  • Rogerio Carvalho Silva, Brasil
  • Marina Ochoa, Santa Fé, Argentina
  • Eliana Oliva, Buenos Aires, Argentina
  • Ramón Humano, Venezuela – Argentina
  • María Griselda Castro, Unquillo Córdoba, Argentina
  • Arnaldo Ariel Vargas, Catamarca, Argentina
  • Natalia Cielo Galindez, Córdoba, Argentina
  • Soledad Petrelli, Buenos Aires, Argentina
  • Nida Sagak, Turquía – Pisac
  • Soledad Petrelli, Buenos Aires, Argentina
  • Paloma Arredondo Arecena, Iquique , Chile
  • Natalia Soto Arenas, Santiago de Chile
  • Carmen Chacana Vera, Valparaíso Chile
  • AuraLuz Pilco Pizango, Chazuta, Perú

 

Este encuentro compartido en Pisac no sólo nos deja obras y aprendizajes, sino también la certeza de que el barro, como la memoria, une pueblos, saberes y generaciones. Desde la Revista CERAMICA, agradecemos profundamente a quienes lo hicieron posible y a cada ceramista que, con sus manos, su voz y su historia, aportó a esta experiencia colectiva.