En el próximo mes de abril se cumplirá el primer año de la publicación de “Falsa
información”. Contrariamente a lo que había supuesto no hubo ninguna reacción y/o réplica de los autores cuestionados, al menos por ahora. Sí hubo quejas y comentarios adversos de parte de algunos profesores, de escuelas oficiales, que seguramente se sentirán incómodos al tener que dar explicaciones a los alumnos que hayan leído “Falsa Información”, acerca de ciertos temas en especial. A todos ellos los he invitado a publicar sus quejas en esta revista y así, de esta forma, abrir el debate. Tampoco hubo respuestas. Hasta ahora pude evaluar dos posibilidades: o el libro fue demasiado contundente y no deja espacio a la réplica o a nadie le importa nada y prefieren mirar para otro lado. También algún lector distraído me preguntó si el libro era una broma o un divertimento y le tuve que explicar que si bien el lenguaje utilizado puede parecer irónico y hasta humorístico los temas tratados son extremadamente serios e influyen, directamente, en la mala información de alumnos y/o principiantes de la cerámica. Lo que me sigue preocupando es el silencio de los directivos de las escuelas y otros responsables del área educativa y esto me hace temer por el futuro de nuestra cerámica. Por mi parte voy a seguir esperando algún resultado, confío que positivo, de este intento de mejorar algunos aspectos de nuestra actividad.
Falsa información
Por Julio Gómez - 03/2007