Después de años de no verlo me reencontré con él durante el último Simposio en Avellaneda ( Mayo de 2012 ), me comentó que todavía seguía con la cerámica pero ya no como antes.
Siempre lo recordaba como una persona llena de proyectos pero poco constante y me lo confirmó cuando me relató algunas de sus experiencias. En una de esas etapas practicó algo de alfarería con torno y después de aprender lo básico decidió exponer sus trabajos en una muestra que se le ocurrió denominar » Asimetrías «, para sorpresa de todos esta muestra resultó muy exitosa y motivó a muchos ceramistas, los más torpes e ineptos, a incursionar en esa disciplina, todo esto lo llevó, casi sin proponérselo, a convertirse en el líder de un movimiento conocido como «Excéntrico» y que pudo haber marcado una época en nuestra cerámica artística pero no lo hizo, el motivo fue que a partir de seguir practicando con el torno ya sus piezas iban adquiriendo cada vez mayor redondez y entonces comprendió que era el momento de dedicarse a otra cosa. Ya sin su líder el movimiento «Excéntrico» se disolvió rápidamente y cayó en el olvido. Después de esta experiencia, que le había dado cierta notoriedad, realizó otros intentos pero todos, o casi todos, con escasa fortuna y entonces decidió cambiar de objetivo optando por tratar de ganar dinero en vez de prestigio, instaló un taller, muy bien equipado, con la intención de producir obras artísticas en pequeño formato y producciones seriadas pero tuvo que enfrentarse con la incomprensión de sus presuntos clientes que no demostraron ningún interés por lo ofrecido. Uno de ellos, con el que había simpatizado, le sugirió que se dedicara a la fabricación de souvenirs, baratos y de temas populares, y a partir de hacerlo comenzó a ganar dinero. Hoy ya afirmado económicamente se puede dar el gusto de producir su obra artística y cuando le pregunté si la exponía me dijo que no, que cuando tenía alguna cantidad terminada invitaba a sus amigos y practicaban tiro al blanco.
REENCUENTRO
por Julio Gómez - 08/2012