GUARIDA por Marina Stimolo, Glenda Areco y Sofía Chaskita en DAWA

del 11 al 28 de abril de 2024, Marina Stimolo, Glenda Areco y Sofía Chaskita  presentan la muestra «Guarida» en el Taller Galería DAWA, de miércoles a sábados de 14 a 19 hs y los domingos de 12 a 19 hs, Estados Unidos 381, San Telmo.

“Un nido que nos protege y a veces se convierte en una fortaleza introspectiva, seres nacidos del pajonal, el monte y el pantano, formas orgánicas  que emergen como reminiscencias de un paisaje habitado.

Guarida narra el oficio cerámico como refugio y  concede atención a otras formas de vida para poder vincularnos con el entorno de un modo distinto, alejado del hábito de poner lo humano en el centro del mundo y los relatos”.

«Llegué a la cerámica a los 16 años, empecé en el IMCA talleres extracurriculares, luego estudié el Profesorado en Bellas Artes con orientación a grabado, y al tiempo volví al IMCA y me recibí de «Técnica  superior en Cerámica».
Ahora estoy trabajando en nidos de gran formato, siempre con con el concepto de casa, cobijo, refugio… Empecé por las casas y después se fue ampliando la búsqueda a otras posibilidades de casas, no solamente de humanos sino de todos los animales en la necesidad de encontrar refugio. Trabajo con tierra de Bernal para algunas de las piezas y otras con tierras comerciales, siempre cerámica de baja.
A Guarida llegamos convocadas por Caro, de Gulubu Cerámica, que sintió que nuestros trabajos, juntos, podían interactuar bien , y realmente que no se equivocó, porque estamos muy contentas con la muestra, cómo quedó cada una de nosotras interactuando entre sí.»
Marina Stimolo

«En el 2014 hice un viaje al sur de Chile, participé de un voluntariado de permacultura y una de las actividades de los talleres que se daban en ese espacio era hacer cerámica recolectando arcilla local y después hicimos una horneada en pozo, a leña. Para mí esa experiencia fue un portal. Desde ese día no dejé de hacer cerámica, hace yá 10 años. Esa experiencia me cambió la vida. Después hice mi formación más académica en la UNA (Universidad Nacional de las Artes).La Cátedra de Graciela Olio, fue también muy importante en mi carrera. Fueron experiencias muy transformadoras y reveladoras.
Actualmente vivo en la isla y tengo mi taller acá. Estoy experimentando con arcillas locales, investigándolas. Hago horneadas a leña y también en horno eléctrico. En el caso de la muestra son todas las piezas horneadas a media temperatura, a 1180º y algunas de ellas tienen arcillas de la isla.
Y sobre GUARIDA, esos seres que presento en la muestra son seres que habitan acá en el territorio de la isla, nacidos del pajonal, del río, del barro. Las texturas tienen que ver con el lugar que habito. Hace tiempo que vengo trabajando con el barro como maestro, como materialidad para construir un hogar, materialidad que construye… los refugios lo podemos ver en la naturaleza, en los hormigueros, en los nidos de los horneros, las casas de adobe y mismo nuestras casas hoy en día construídas a ladrillo, que no es más que barro cocido. Me interesa esa relación entre el barro y la naturaleza. Y la construcción de la vivienda. GUARIDA tiene que ver con eso. Para mí cada pieza es un cobijo, que es un hábitat, pero a la vez es un ser que se construye a sí mismo y que en sí mismo es un refugio. Es un espacio seguro.»
Sofía Chaskita

Mis inicios en la cerámica tienen lugar en Ushuaia, en un Polivalente de Arte con orientación en Artes Visuales. A los 18 años vine a vivir a Buenos Aires y empecé talleres en el instituto de cerámica de avellaneda, institución en la cual me recibí de profesora de artes visuales años más tarde. También realicé seminarios de posgrado con Graciela Olio y su equipo, cuya experiencia enriqueció la formación de oficio previa.
En relación a lo expuesto en “GUARIDA”, se trata de un conjunto de piezas escultóricas que evocan un territorio habitado, poniendo el énfasis en las texturas y experiencias sensoriales que surgen al vincularse con un entorno natural.  Considero que en mi práctica el diálogo entre naturaleza, cerámica y oficio se vuelve vital.
Agradecemos a Dawa por habernos convocado y propiciar la exposición y venta de nuestros trabajos, pero particularmente también agradezco haber compartido con Marina y Sofia, ya que conocía sus piezas solo a través de las redes, y esta convocatoria hizo posible el encuentro e intercambio, que resultó siendo muy amoroso y empático.