Hace unos pocos días me escribió una ceramista, desde una zona rural de nuestro país, relatándome una historia que no me sorprendió por saber de donde proviene pero que no deja de provocarme indignación. Esta ceramista me explicaba que se había interesado en la oferta de un publicitado » Instituto de Ceramología » con relación a una carrera que denominaban » Tecnicatura en cerámica «, cuando solicitó las condiciones que ofrecían le informaron que dicha » Tecnicatura » se podía cursar a distancia, vía internet, en 3 módulos de 4 meses cada uno y que al finalizar los mismos, previa aprobación de un examen final,se le otorgaría un título, con validez internacional. Luego de inscribirse, y pagar cuotas adelantadas, le informaron que tenía que comprar una importante cantidad de libros para poder aprobar las evaluaciones semanales que tenía que realizar, según me dijo fueron, al principio, unos veinte ( 20 ) libros cuyo costo no tenía previsto por no haber sido informada previamente, después de comprarlos y al seguir adelante con esta situación fue castigada, en dos ocasiones, por no haber presentado sus trabajos semanales en los plazos previstos y el castigo consistía en pagar cada cuota por duplicado !, para evitar ser nuevamente castigada envió dos ( 2 ) trabajos juntos y por este motivo recibió una suspensión, paralelamente , el responsable de esta «Tecnicatura» le enviaba opiniones de muy mal gusto tales como » que si amasaba barro del río estaba amasando » mierda » y no debía hacerlo » !
Al iniciar el 2º Módulo, luego de comprar otro lote de libros que le iban exigiendo , comenzó a recibir agravios e insultos sin motivo que lo justificara y al pedir explicaciones por este humillante maltrato recibió una notificación donde se le informaba que había sido definitivamente suspendida ( Leáse expulsada ) y daban por finalizado todo tipo de comunicación.
La ceramista, víctima de esta incalificable modalidad docente, me envió todos sus datos particulares que no voy a publicar , por ahora, tratando de evitarle más inconvenientes y cuando me comenta que tiene las copias de todos los mails, que envió y recibió, que certifican lo expuesto anteriormente le aconsejé que recurra a un buen abogado para efectuar legalmente sus reclamos.
Por mi parte espero que el hecho de publicar este relato pueda servir de advertencia a nuestros lectores y evitar que en el futuro haya más damnificados. Si algunos de nuestros lectores quieren hacernos llegar sus opiniones y/o comentarios los recibiremos con mucho interés.
TECNICATURA
por Julio Gómez - Agosto/2013