COLECCIONISTAS

 por Julio Gómez - 2/2013

Me vino a ver por indicación de un amigo común y se presentó como apoderado de un grupo de coleccionistas de arte, fuertes inversores que operaban habitualmente en el exterior del país y ahora estaban estudiando nuestro Arte cerámico con la intención de evaluar sus posibilidades. La consulta que me hacía este señor era relativa al potencial valor que podrían tener las obras de ceramistas argentinos en caso de ser adquiridas por sus representados, de inmediato le expliqué que no tenía la respuesta por estar este tema fuera de mis conocimientos y le sugerí que consultara con galeristas y críticos de arte especializados en obra cerámica, entonces me comentó, sonriendo, que había comenzado por esa vía y estaba muy sorprendido por las respuestas recibidas, además de su ignorancia sobre el Arte cerámico evidenciaban un profundo desprecio por el material utilizado al que consideraban falto de nobleza y solamente apto para objetos utilitarios y artesanías baratas, después quiso conocer mi parecer al respecto y me costó reaccionar ante semejante estupidez pero cuando lo hice le expliqué que, en mi opinión, no había otro material que reuniera las características que tenía la cerámica y que a través de la misma y de la piedra, un material cerámico natural, se podía reconstruir buena parte de la evolución cultural de la humanidad. Ningún otro material utilizado en las denominadas «obras de arte» tienen las posibilidades de los materiales cerámicos en cuanto a su versatilidad y capacidad expresiva, también le comenté la opinión del conocido artista ceramista español Llorens Artigas cuando decía que «la cerámica será arte o artesanía según que quién la haga sea un artista o un artesano» y entonces este señor pareció entender mi mensaje y me dijo que ahora sí podía recomendar a sus representados que inviertan en obras cerámicas.
Espero que a través del relato de esta historia los propios ceramistas tomen conciencia de que la defensa y promoción del material con que trabajan es una de las claves para que las obras cerámicas sean consideradas con el valor que realmente merecen.